ACOSO ESCOLAR O BULLYING

Isabel Carrasco Cabeza, Psicóloga Especialista en Psicología Clínica.

La violencia en la escuela ha existido siempre, pero ahora la sociedad está más sensibilizada sobre sus efectos. Tanto los profesores como los padres consideran que los problemas de convivencia en el ámbito escolar entre los niños han aumentado en los últimos años. Uno de cada cuatro alumnos españoles sufre acoso o violencia en las aulas. Éste es uno de los datos más significativos que se extraen del estudio «Violencia y Acoso Escolar en España» realizado entre 25000 alumnos de 14 comunidades ( A. Oñate, I. Piñuel 2006)

El acoso escolar o Bullying (El término bullying fue introducido por un psiquiatra noruego hace 20 años, para definir las actitudes de hostigamiento, acoso o discriminación que se dan en niños en edad escolar) se manifiesta cuando el alumnado se ve expuesto, de forma repetida y durante un tiempo, a diferentes formas de maltrato por parte de un compañero, compañera o grupo. Los comportamientos de acoso más frecuentes que denuncian los niños son la utilización de motes, que no les dirigen la palabra, que se ríen de ellos cuando se equivocan, les acusan de decir cosas que no han hecho o dicho, se burlan de su apariencia física, les imitan, les pegan, etc.

El agresor acosa a la víctima en los baños, en los pasillos, en el patio, reservando sus acciones en ausencia de los mayores. E incluso en algunos casos, el acoso sobrepasa las paredes del colegio, pasando a ser telefónico y por correo electrónico.

El bullying puede ser sexual, cuando existe asedio, inducción y abuso sexual, puede tratarse de una exclusión social, cuando se ignora, se aísla y se excluye al otro, puede ser psicológico, cuando existe una persecución, intimidación, tiranía, chantaje, amenazas al otro, o puede ser físico, cuando se golpea, empuja o se organiza una paliza al acosado.

El acoso escolar no siempre se puede detectar, pero existe un grave riesgo  tanto para la víctima como para el acosador si no se identifica a tiempo. Tanto el agresor como el acosado sufren y necesitan ser escuchados, atendidos y tratados.

  1. ¿CÓMO SON LAS VICTIMAS DEL ACOSO ESCOLAR?
    Son niños con una personalidad insegura, baja autoestima, dificultades de relación y en habilidades sociales (casi no tienen amigos y generalmente están solos) sumisos, con altos niveles de ansiedad y descontentos con su vida personal. Además físicamente suelen ser menos fuertes, más pequeños de estatura y con peculiaridades como llevar gafas,  sufrir obesidad, tener un color del pelo diferente o ser de otra raza. Aunque cada vez es más frecuente que no exista un rasgo físico considerado «negativo», ya que incluso cualidades positivas como  tener mejores notas o ser afortunado físicamente son motivos de rechazo y de acoso. Son niños con muchas dificultades para hacer amigos. Por ello, cuando los tienen se apegan excesivamente a ellos, creando unos lazos de gran dependencia. Se suelen sentir obligados a obedecer e incluso cuando no están de acuerdo con lo que los amigos les proponen. Son niños poco populares en la clase y no mantienen un grupo que les proteja, no cuentan con una red social de apoyo. Esto crea vulnerabilidad social y predispone a la sumisión y a la victimización.
  2. CONSECUENCIAS DEL ACOSO ESCOLAR Son muchas e importantes, el niño que sufre acoso escolar presenta problemas psicosomáticos (dolores de estómago, de cabeza, vómitos, náuseas..), depresión, ansiedad, actitudes pasivas, pérdida de interés hacia los estudios que pueden desencadenar en fracaso académico, problemas fóbicos relacionados con el ámbito escolar o pensamientos suicidas. Es frecuente que se muestre triste, constantemente  contrariado y  con dificultades para conciliar el sueño.
  3. ¿QUIÉN ES EL ACOSADOR?
    Normalmente el agresor tiene un comportamiento provocador y de intimidación permanente. Es agresivo y con fuerte impulsividad y poco control de la ira. Presenta dificultades para ponerse en el lugar del otro, bajo nivel de resistencia a la frustración, poco reflexivo, gran capacidad exculpatoria, es decir, sin sentimiento de culpa: «el otro se lo merece». Además es evidente su déficit en habilidades sociales y en la resolución de problemas. Suelen tener dificultades de integración social y escolar, bajo interés por la escuela, carencia de fuertes lazos familiares, emotividad mal encauzada en la familia y modelo agresivos como forma de resolver los problemas.
  4. CONSECUENCIAS PARA EL AGRESOR
    Su conducta le va a dificultar la convivencia con los demás. Aprende que la forma de  obtener sus objetivos es a través de la violencia y es frecuente que generalice  su conducta a otros ámbitos como la familia o los amigos. Su evolución en el futuro puede derivar, si no se trata, hacia la delincuencia o la agresión familiar.
  5. ¿QUÉ PUEDEN HACER LOS PADRES DE UN NIÑO VICTIMA DE BULLYING?
    Si los padres sospechan que su hijo es víctima de bullying, no le diga que se ocupe de solucionar sus propios problemas, hable con él y no le haga sentir culpable de la situación. Comprométase a ayudarle. Puede poner en práctica las siguientes actuaciones:

    1. Investigue en detalle lo que está ocurriendo, escuche a su hijo y no le interrumpa. Deje que desahogue su dolor.
    2. Póngase en contacto con el profesor o jefe de estudios y comente lo ocurrido buscando su cooperación
    3. No estimule a su hijo a que sea agresivo o tome venganza
    4. Discuta alternativas asertivas para responder a los acosadores y practique la respuesta con su hijo
    5. Dependiendo del grado de ansiedad y de miedo en que este envuelto su hijo, busque un psicólogo para ayudarle a superar el problema.
  6. CONSEJOS SI SU HIJO ES EL ACOSADOR
    1. Investigue el porqué acosa
    2. Hable con profesores, pídeles ayuda, escucha todas las críticas sobre tu hijo
    3. Acérquese más a los amigos de su hijo y observe que actividades realizan
    4. Hable con él y escuche lo que te tiene que decir
    5. No culpe a los demás por la mala conducta de su hijo
    6. Canalice la conducta agresiva de su hijo hacia algún deporte de competición, por ejemplo
    7. Déjele claro lo que ocurrirá si el acoso continúa
    8. Ayúdale a que manifieste insatisfacción y frustraciones sin agresividad
    9. En caso de no poder solucionarlo en el ámbito familiar acuda a un profesional que les oriente y entrene para terminar con el problema
  7. ¿QUÉ SE PUEDE HACER EN EL ÁMBITO ESCOLAR  Y FAMILIAR?
    Es necesario cambiar actitudes sobre el fenómeno. Por ello,  es fundamental la participación conjunta de padres y profesores. No hay que asignar culpabilidades sino trabajar y comprometerse a buscar una solución conjunta.El papel del profesorado es crucial en la prevención y en la intervención directa del bullying. Aspectos como la detección precoz, la derivación de casos, la participación en programas socio-educativos, el entrenamiento de grupos de alumnos como mediadores, tutorías concretas en las que se trabaje reglas de convivencias y disciplina («tutor de convivencia»), programas anti-bullying en los que se incluya víctima, agresor/a y espectadores/as, etc. son algunas de las actuaciones que los profesionales de la enseñanza pueden llevar a la práctica para atajar este grave problema escolar.Por otro lado, las familias deben asumir su papel de educar. Se debe atender a las necesidades de afecto y comunicación que estos niños/as suelen no tener cubiertas, (sobre todo los agresores/as), y por supuesto presentar reglas y formas de control como mecanismos indispensables para regular la convivencia y el sistema de valores y juicios sobre lo que está bien o mal, sobre lo que se puede hacer o no se puede hacer.La presencia de las familias en los centros educativos es fundamental y su participación y comunicación con tutores, departamento de orientación y equipos educativos es básica.
  8. ¿QUÉ HACEMOS LOS PSICÓLOGOS?
    Cuando el problema adquiere unas dimensiones clínicamente significativas, tanto para la victima como para el agresor/a es necesario un tratamiento psicológico. El tratamiento con el niño que sufre acoso escolar va dirigido a reducir y eliminar sus altos niveles de ansiedad, su sintomatología depresiva y a ofrecer y a enseñar recursos necesarios para ser capaz de enfrentarse a estas situaciones (Programas de Entrenamientos en Habilidades Sociales, etc.).La intervención con el agresor/a va encaminada a manejar su  falta de control de impulsos, su ira, su hostilidad hacia los demás, así como su baja autoestima, sus dificultades sociales (Programas de Entrenamiento en Habilidades Sociales)  y de resolución de los problemas y posibles comportamientos antisociales (vandalismo, robo, consumo de alcohol….).
8 comentarios
  1. Necesito asesoramiento para ayudar a mi hermanita de casi 14 anos a superar y aprender a defenserse del bullying. Si alguien puede contactarse, eternamente agradecida.

    • Hola Tamar, si realmente tu hermana está sufriendo Bullying es aconsejable que aunque tenga tu ayuda, vaya a una terapia psicológica para evaluar exactamente que está ocurriendo, que recursos psicológicos tiene tu hermana, que otros tiene que aprender y hablar con el centro escolar para saber que deben hacer para evitar el problema. Sin tener una información completa de que lo que está pasando es poco eficaz dar estrategias concretas. Lo que sí te aconsejo es que si sabes que esto ocurriendo, hables con el colegio cuanto antes.
      Un cordial saludo

  2. Necesito ayuda mi amiga esta sufirndo de Bullying esta desesperada tengo miedo quiero ayudarla

    • Hola Melina, entiendo que desees ayudar a tu amiga pero creo que el mejor consejo es que la animes a buscar ayuda de un profesional. En muchas ocasiones cuando una persona está sufriendo Bullying no sabe cómo actuar y qué hacer para que dejen de acosarla. Por ello, hay que hacer un análisis más profundo del problema y ofrecer a la persona acosada soluciones concretas para su problema, no hay remedios generales.
      Un cordial saludo
      Isabel Carrasco

  3. Hola Isabel soy Lic. en psicologia, estoy estudiando un diplomado en psicoterapia infantil, me llego un caso de un niño que sufre acoso escolar de 11 años, me gustaria que me orientaras que tipo de pruebas o dinamicas puedo aplicar en este tipo de casos..saludos y gracias !

  4. Me ha parecido muy interesante este artículo. Desde la secundaria e incluso hasta el bachillerato he experimentado más de una vez situaciones en las que me he sentido ignorada o rechazada por mi forma de ser (brillante académicamente, algo excétrica, ingenua y con muy pocas habilidades sociales) e incluso he tenido compañeros que me han ridiculizado en voz alta delante de toda la clase durante varios años. Sí hay algo que me sigue inquietando incluso ahora y es que, pese ha contar con un grupo de amigas reducido pero estable, estas jamás tomaron parte activa a la hora de defenderme de aquellas personas que me apartaban, ignoraban o incluso se metían abiertamente conmigo. Debo decir que mi inseguridad en mis relaciones, incluso con las personas más queridas y de relaciones más largas, es una constante, pero aún así a día de hoy muchas veces me planteo si debí o debo «reclamárselo» el no haberme ayudado o defendido; incluso a veces me planteo si son buenas amigas o si debo cambiar de grupo (opción que, en el hipotético caso, me resulta aterradora, ya que como he dicho tengo unas habilidades sociales prácticamente nulas). Me pregunto entonces si sería posible que me dieses alguna orientación o indicativo sobre como tomárme esta situación que realmente nunca he llegado a resolver, y que en momentos peores hacer que mine mi confianza en ellas y en mi persona. Muchísimas gracias.

    • Hola María. Creo que te vendría muy bien trabajar para mejorar tus habilidades sociales. Aprender estrategias para incrementar y mejorar las relaciones con las demás personas. Esto lo puede hacer cualquier psicólogo clínico especialista en terapia cognitivo-conductual. Pienso que necesitas que alguien profesional no solamente te aconseje si no que te enseñe qué hacer.

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